Viernes, tarde tranquila, escribiendo esta entrada con mucha emoción porque hoy mi nivel de cortisol está bajo y créanme que eso es raro, no suele pasar porque si hay alguien que lleva el cortisol en la venas, ésa es su servidora.
Creo que debo adjudicar este raro fenómeno al hecho de que las cosas que planeé hacer el día de hoy fluyeron tal cual necesitaba que fluyeran, salvo por la señora de las tortas de papa que hoy decidió no abrir su negocio y me quedé con el antojo, pero fuera de eso en realidad estoy sorprendida y quería compartir con ustedes que mi cortisol está bajo y aplacado y espero que nada ni nadie vaya a cambiar eso aunque sea sólo por hoy.
Cortisol bajo, estrés bajo
Es curioso cómo cuando no hay factores estresantes que hagan que el cortisol suba todo funciona. Nos sentimos bien, tranquilos y serenos. Disfrutamos de las cosas que estamos haciendo, nuestro cuerpo se siente más ligero y nuestro estado de ánimo es bueno. La mente está bajo control. Ojalá y pudiera durar por siempre, pero al menos en mi caso estos días son un verdadero lujo que no puedo dejar de aprovechar y agradecer.
Agradecimiento especial
Tengo que darle las gracias a algo que contribuyó enormemente a que mi cortisol bajara esta tarde. Se trata de la marca de donas Krispy Kreme. Los que son amantes de estas donas sabrán a quién me refiero. Pude comerme una deliciosa dona rellena de cajeta y tengo dos en espera para la cena. ¿Alguien gusta? Son lo mejor del mundo y además ¡bajan el cortisol! Pasen una excelente tarde de viernes y excelente fin de semana.
Gracias por leerme.
